ALMAS GEMELAS

En uno de los blogs que habitualmente sigo, hoy se hablaba acerca de los hilos que de manera mágica y sorprendente se entrecruzan en el discurrir de la vida concediéndonos la oportunidad única, y nada despreciable, de encontrarnos con personas a las que nos parece conocer de toda la vida.

Nada tiene que ver con nuestra capacidad de relacionarnos, la simpatía que irradiemos, lo accesibles que nos mostremos habitualmente... sea como sea uno llegará el momento o momentos, para los más privilegiados, en los que sin concesiones ni esfuerzos, te encontrarás de frente con alguien al que desearas contarle cosas que jamás contaste, con el que desearás compartir tú sensibilidad de manera ilimitada, con el que podrás mantener una conversación sin pensar en si resultará inapropiada o si resultarás juzgado y lo más importante, con el que podrás permanecer en un silencio no incómodo, el silencio enriquecedor, el silencio compartido.

Es entonces, cuando te preguntas porque tienes estas sensaciones frente a un verdadero desconocido/a, cómo es posible que una persona que no forma parte de tú entorno sea capaz de comprenderte y parezca conocerte tan bien...

Para mí estas personas, son privilegiados regalos que de ningún modo hay que dejar pasar de largo, almas gemelas a las que degustar durante un tiempo preciado... los mejores candidatos para decorar tú existencia de momentos inolvidables.

Os dejo con algunas imágenes de "Intocable", una cautivadora película francesa que si no habéis visto debéis incluir en vuestra lista de actividades para estas Navidades, en esta preciosa y emotiva historia encontraréis el mejor ejemplo de esa especial conexión entre dos personas de la que he tratado hoy de hablaros...

¡FELIZ SEMANA!