Una vez más nos sumamos a la iniciativa del blog NIKA VINTAGE y esta vez lo hacemos con algo dulce ¡El chocolate!!!! ese manjar al que una no puede renunciar por mucho que se lo proponga y que nos toca muy de cerca alimentando nuestros sentidos y regalándonos la vista con intensas fragancias, sabores explosivos y texturas sorprendentes...
¿Os apetece una doble ración de MACRO-CHOCOLATE en la mejor compañía?
Con este post, participo en el encuentro blogger semanal de Nika Vintage
Fotografías: Cosas de Palmichula
ay madre que antojo me está entrando de comer algo de chocolate!! mmmm madre mía, que pintaza tiene, con lo que adoro yo el chocolate!!
ResponderEliminarBesazos
Pues no te cortes, seguro que hay por ahí algo que tenga unos gramillos de chocolate con el que paliar tú antojo.
EliminarUn abrazo y gracias por tú comentario Lorena
Palmira
OOOH!!!! Menuda tentacion!!! Bien poquito me duraria a mi con lo que me gusta el chocolate!!
ResponderEliminarUnos macros chulimos y apetosos!!
besos!
Nika
Gracias Verónica, un placer para mí participar en tú iniciativa, prometo evitar por un tiempo los macros alimenticios y tentadores.
EliminarUn bs
Palmira
Bueno, una delicia para las macros...ya siento el chocolate en el paladar!!
ResponderEliminarBss
Es lo que tienen los macros, que al verlos tan de cerca una siente que están al alcance de su mano.
EliminarUn abrazo y gracias por tú comentario
Palmira
El chocolate es un vicio tremendo en toda casa donde haya un cachito jajajaja. Ese bizcocho es una tentación muy grande que nos has puesto así que ahora hay que consolarse con verlo en modo macro. Por cierto seguro que estaba buenísimo y en casa ha durado bien poco. Hasta las tazas me han gustado fíjate.
ResponderEliminarCon tu permiso me quedo aquí pegadita a tu blog, tengo mucho que descubrir y lo que he podido ver me ha super encantado.
Besitos
Gracias Beatriz, todo un honor contar con tú presencia por aquí, espero que lo que vayas viendo te vaya gustando tanto como el bizcocho que en su momento duró no poco, poquísimo.
EliminarUn beso
Palmira