Siempre he querido tener una caravana, pequeñita y manejable con la que recorrer Europa, y si se tercia, porque no, el resto del mundo... Buscar lugares idílicos... Sacar la mesa de camping, la sombrilla, dos sillas plegables, un mantel a cuadros y dos hamacas y ¡ale! ¡a merendar! con mi amore y a ¡dejar pasar el tiempo! acompañada del silencio, la brisa y los caracoles...
Siempre, he pensado en como la decoraría, contando con el poco espacio disponible, sin caer en el error de recargarla, buscando crear un rincón, encantador práctico, útil y acogedor... Una vajilla coqueta, un rincón de descanso, una guirnalda, papel en las paredes, alguna planta, una colcha estilo patchwork...
Cuando vi estas imágenes, ese capricho escondido volvió a renacer con fuerza en mi interior... Porque como si alguien me hubiera leído el pensamiento, mi deseo, se materializó, así, de golpe... Y creedme que me vi allí, sentada en la alfombra en la puerta de mi caravana, tocando canciones de amor con una guitarra que nunca he sabido tocar, aprovechando la luz de la luna, las estrellas y veinte bombillas de colores más, comiendo con fruición sushi y pastel de zanahoria, sabiendo que la felicidad existe y ha decidido aceptar mi invitación... ¡FELIZ JUEVES!
Lo cierto es que nunca había visto una caravana con tantos detalles y decorada con tan buen gusto, me alegro de que os guste. Un beso fuerte para las dos y FELIZ FIN DE SEMANA!
¡¡Ohh, que monería!!
ResponderEliminarBesos mil de las dos
J&Y
Lo cierto es que nunca había visto una caravana con tantos detalles y decorada con tan buen gusto, me alegro de que os guste.
EliminarUn beso fuerte para las dos y FELIZ FIN DE SEMANA!
No puede ser más ideal, la comparto en Diariodeco!!
ResponderEliminarxoxo
Es preciosa!
EliminarFeliz fin de semana!